Alumnos de la Facultad de Derecho trabajan en un proyecto de Innovación Docente colaborativo y de servicio

Estudiantes de Master de la Abogacía y de Grado en Derecho elaboran una demanda simulada sobre un problema real propuesto por el Programa de Acercamiento Intergeneracional. 

Estudiantes de tercero y cuarto del Grado en Derecho y del Master en Abogacía participan este curso académico en un Proyecto de Innovación Docente denominado ‘Un ‘sistema de casas’ para la universidad española basado en la simulación de juicios y el aprendizaje servicio’ donde trabajan sobre un caso real propuesto por un participante del Programa de Acercamiento Intergeneracional del Vicerrectorado de Responsabilidad Social, Cultura y Deportes de la Universidad de León (ULE). Una problemática seleccionada entre otras diez que se presentaron al Programa tras dar difusión de la actividad docente en los Centros de Mayores de León.

Esta propuesta es una ampliación del proyecto docente que se llevó a cabo el pasado año bajo el título ‘Aula Judicial’ basado en el enjuiciamiento de casos reales por los alumnos y con marcado carácter socializador ya que también se contaba con la participación de las personas mayores como partes o jurados de los procesos judiciales. Sin embargo, el éxito suscitado tras aquella dinámica formativa, el Grupo de Innovación Docente ‘Aula Judicial’ quiso ir más allá durante este año al incorporar en su proyecto una nueva metodología entre profesores, alumnos y sectores más desfavorecidos para alcanzar una formación de excelencia en Derecho.

Así el nuevo proyecto tiene carácter colaborativo y de aprendizaje servicio ya que por un lado está estructurado como un ‘sistema de casas’ donde están involucrados alumnos de distintos cursos para ejercer diversos niveles y responsabilidades, y por otro encierra un carácter de servicio a la sociedad ya que se intenta aportar solución jurídica a problemas reales que suscitan las personas mayores que se han ofrecido a participar en el proyecto docente.

“El sistema de casas es parecido a los grandes despachos de abogados donde figuran socios, seniors y juniors, de ahí que en esta propuesta hayamos querido que los grupos de demanda y contestación funcionen como una casa académica”, explica Pedro Alvarez Sánchez de Movellán, coordinador del proyecto y profesor del Área de Derecho Procesal de la ULE. De este modo, los alumnos de 3º ejercen de letrados junior, los de 4º letrados seniors y los estudiantes de master son socios. Sánchez de Movellán subraya que “frente a las clásicas organizaciones de alumnos en la universidad española, el ‘sistema de casas’ vinculado a la enseñanza británica tradicional, se singulariza por la educación vertical, agrupa a alumnos de distintos cursos y establece los cauces para la colaboración entre ellos”.

El primer paso para iniciar la metodología y adscribir los roles a los alumnos fue conocer la decena de problemas reales propuestos por las personas mayores vinculadas al Programa de Acercamiento Intergeneracional. 

Los casos fueron expuestos por los propios afectados durante una reunión mantenida con Pedro Álvarez Sánchez de Movellán, Eva Sanjurjo, profesores del Área de Derecho Procesal, y Beatriz Abella, técnico del programa de Acercamiento entre personas mayores y estudiantes universitarios, un programa fruto de la colaboración entre la Gerencia de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León y la Universidad de León en el que participan también los ayuntamientos de León y Ponferrada.

De los diez problemas descritos se seleccionó finalmente uno sobre un error en el tratamiento dental de un paciente. “Se valora la judicialización del caso, el que exista un conflicto con alguien, con un colectivo o una comunidad de propietarios, por ejemplo, pero no con una administración”, explica Sánchez de Movellán al tiempo que aclara que los casos expuestos que quedaron fuera “servirán a los alumnos de tercer curso en los ‘minijuicios’ programados para el segundo cuatrimestre”.

Tras la selección el afectado mantuvo una reunión con un grupo de cinco alumnos de cuarto curso que representaba al grupo demandante, el cual se encargó de redactar la demanda y exponerla al otro grupo integrado por estudiantes del master que ejercieron de observadores. La tramitación del proceso se concretó con la celebración del acto del juicio la semana pasada.

Los responsables del proyecto de innovación docente señalan que la actividad define diversos objetivos para el curso como son la creatividad en la labor docente, la mejora en el seguimiento de los estudiantes “ya que la propia tramitación del proceso exige a alumnos y profesores alcanzar los objetivos que exige cada momento del proceso judicial”, la obligada actualización de conocimientos en otras materias como Derecho Civil y Penal dado el carácter transversal de la asignatura de Derecho Procesal y sobre todo el hilo conductor de la metodología como es el aprendizaje servicio. “Ya no es solo la socialización del proyecto mediante la atención a los conflictos jurídicos que padecen las personas mayores, ahora los alumnos de cursos superiores atienden a los problemas de los cursos inferiores, de esta manera se refuerzan su experiencia jurídica, crecen en capacidad de servicio y enriquecen su satisfacción personal”, concluye Sánchez de Movellán.