La Universidad une a más de 100 investigadores en el grupo ‘ULEgif’ para ofrecer una respuesta multidisciplinar frente a la emergencia de los incendios forestales

  • El grupo de trabajo para la Gestión Integral de Incendios Forestales integra a 18 áreas de conocimiento que van desde la ecología, ingeniería forestal, salud pública y antropología social, hasta la gestión ganadera, la geografía y la ingeniería industrial
  • El objetivo es fomentar una cultura del fuego en la provincia de León y aportar soluciones reales y duraderas al problema de los incendios, entendiendo que es el síntoma del abandono del medio rural y la falta de gestión forestal
  • Boca de Huérgano y Páramo del Sil serán los primeros escenarios de trabajo sobre el terreno de ULEgif, que mantendrá una reunión con el consejero de Cultura de la Junta de Castilla y León en el mes de noviembre

León, 15 de octubre de 2025. La Universidad de León “pasa a la acción” ante la amenaza de los incendios forestales que azotaron con virulencia la provincia de León este verano y da un paso al frente poniendo el conocimiento, la investigación y la colaboración al servicio del territorio a través de la creación de ULEgif – Gestión Integral de Incendios Forestales-.

Un grupo de trabajo que nace de la unión de 18 grupos de investigación y más de un centenar de investigadores que buscan ofrecer una respuesta multidisciplinar e integral a las causas y consecuencias de los incendios forestales, conscientes de que la respuesta ante una emergencia ambiental no puede limitarse a la reacción inmediata, sino que debe implicar prevención, conocimiento y reconstrucción.

Sus ámbitos de trabajo abarcan desde la ecología, ingeniería forestal y agronómica, la producción animal, la salud pública y psicológica, la educación ambiental y la antropología social, hasta la economía aplicada, la gestión ganadera, la geografía, la física de la atmósfera y la ingeniería industrial.

Un abanico de especialidades que refleja, según ha señalado la rectora de la ULE, Nuria González, la diversidad del conocimiento y su capacidad de transformarse en acción al servicio del bien común, “el compromiso de la Universidad de León de aplicar la ciencia y la investigación a los problemas reales, de acompañar a la sociedad en la recuperación del territorio y en la prevención de futuras emergencias”.

Un grupo que se gestó en el mismo momento que ocurrió la emergencia, como una reacción inmediata de la comunidad científica universitaria a la magnitud de los incendios que sufrió la provincia de León. “Hemos unidos a expertos de ámbitos muy diversos con el objetivo común de aportar soluciones reales y duraderas a un problema complejo que exige una mirada integral”.

El objetivo es que todo este conocimiento científico y técnico sirva como base para la toma de decisiones políticas y para orientar las estrategias de gestión forestal y prevención de incendios. En esta línea, según destacó la rectora, el próximo mes de noviembre mantendrán una reunión con el consejero de Cultura, Gonzalo Santoja, como primer contacto de ULEgif con la Junta de Castilla y León, con el fin de canalizar los resultados del grupo hacia la acción institucional.

LINEAS DE ACTUACIÓN

Las líneas de actuación de ULEgif que van desde la prevención y la educación ambiental, pasando por la extinción y restauración de ecosistemas, hasta el asesoramiento técnico e institucional y el acompañamiento psicosocial a las comunidades afectadas. Su misión no se limita a reparar los daños del fuego, sino a ayudar a construir resiliencia, a generar conocimiento útil y a contribuir a que el territorio esté mejor preparado ante futuros desafíos.

En esta hoja de ruta, el vicerrector de Investigación y Transferencia, Santiago Gutiérrez, destacó además la importancia de planificar el paisaje del futuro, reducir el riesgo mediante una gestión sostenible de la biomasa y fomentar una auténtica cultura del fuego, que permita comprender los incendios forestales como un fenómeno natural que debe afrontarse con conocimiento y responsabilidad.

Asimismo, subrayó también la necesidad de reforzar la bioeconomía rural, reconociendo el papel esencial de las personas que viven y cuidan los entornos naturales. “Debemos valorar y apoyar a quienes mantienen vivos nuestros montes, porque en definitiva están protegiendo también nuestra salud y nuestro futuro”, señaló.

SÍNTOMA Y NO CAUSA

Una línea en la que coincidió Elena Marcos, investigadora del grupo de Ecología Aplicada y Teledetección (GEAT), subrayó la importancia de entender los incendios forestales como una realidad con la que hay que convivir. “No se trata de un fenómeno puntual, sino de un proceso que va a seguir ocurriendo y que debemos aprender a gestionar desde el conocimiento”, explicó.

De ahí que iniciativas como ULEgif sean esenciales para ayudar a la sociedad a comprender la dinámica y los impactos de los incendios, así como para generar herramientas científicas que permitan monitorizar, prevenir y reducir sus efectos. Marcos recordó además la relevancia de la divulgación y la educación ambiental como parte del trabajo universitario: acercar la ciencia a la ciudadanía para promover una gestión más consciente y sostenible del territorio.

La investigadora Flor Álvarez Taboada, del grupo DRACONES, incidió en la necesidad de entenderlos incendios no como una causa “sino el síntoma de un problema más profundo”, vinculado al abandono del medio rural y la falta de gestión forestal. Y recordó que “mientras sigamos centrando el debate en la extinción, estaremos respondiendo, pero no solucionando”. Por ello, remarcó la necesidad de pasar de la reacción a la acción, promoviendo una gestión activa del paisaje y la vegetación que reduzca la propagación de los incendios y refuerce la autoprotección de las comunidades rurales.

PRIMERAS ACCIONES DE TRABAJO

La primera jornada de trabajo de ULEgif sobre el terreno tendrá lugar este viernes 17 de octubre en la localidad de Boca de Huérgano, que dará paso a primeros de noviembre a una segunda en Páramo del Sil, como respuesta directa a la demanda de los municipios más afectados por los incendios. “Nos ponemos al servicio de la sociedad y de las administraciones. Solo hace falta que nos llamen”, destacó Gutiérrez.