Claudia Amaral, Campeona Mundial de Scrabble, impartirá un taller de lectura en la Universidad de León.

Se celebrará la próxima semana, en el marco de los programas de envejecimiento activo que promueve el Programa Interuniversitario de la Experiencia.

El aulario de la Universidad de León (ULE) acogerá el 26 de febrero una interesante iniciativa destinada a los mayores de 55 años, que se enmarca en los programas de “Envejecimiento activo” que coordina la Universidad de la Experiencia. Se trata de un taller denominado “Lectura y Scrabble” que será dirigido por la argentina Claudia Amaral, experta jugadora de este popular juego de mesa, (Campeona del Mundo 2004, y tres veces de su país), en el que se fomentará la interrelación social a través de la lectura.

“La palabra, -explica Claudia Amaral- es el instrumento común a ambas prácticas, y aunque cada una tiene sus propias reglas, ambas sirven para poner de manifiesto la enorme riqueza de nuestra lengua”.

El ‘Scrabble’ es un juego de palabras cruzadas, cada vez más conocido gracias a las aplicaciones (APPS) para portátiles, móviles y tabletas, que es practicado por miles de personas en todo el mundo, en el que se han de formar palabras partiendo de una serie aleatoria de 7 letras. “Una vez formada una palabra,-apunta Amaral-, constantemente se presentan conflictos relacionados con la ortografía, la gramática y su validez, que está determinada por su inclusión en el Diccionario de la Real Academia de la Lengua”.

  • PEQUEÑAS PRODUCCIONES LITERARIAS ACOMPAÑAN CADA PARTIDA DE SCRABBLE

Amaral, que compartirá con los alumnos del Programa interuniversitario de la Experiencia de la ULE sus conocimientos y experiencia docente, ha participado recientemente en el II Congreso Latinoamericano de Gerontología Comunitaria, organizado de forma conjunta por el Ministerio de Desarrollo Social de la República Argentina y la Universidad de Buenos Aires.

En el taller que será impartido en la ULE, se pondrá en práctica la relación que une la literatura y el Scrabble, que permite que alguien aficionado a la lectura pueda volcar en el juego no solo su vocabulario cotidiano, sino también el que forma parte de su acervo. De esta manera, el Scrabble incorpora la literatura como una fuente de la que se va a nutrir su conocimiento. Además la dinámica del juego, por la alternancia de turnos, hace que quien participa pase de ser escritor a ser lector, lo que consigue, en palabras de Amaral que “pequeñas producciones literarias acompañen cada partida”.

De esta manera, todos se pueden convertir en escritores y narradores, ya que una parte de la actividad del taller consistirá en elaborar un texto que contenga las palabras escritas durante la partida. “Quien se anima improvisa y narra, -señala Amaral-, y quien prefiere producir con más detalles lo trae escrito para la siguiente clase”. Todo el proceso consigue hacer real el propósito de “hacer del Scrabble un nuevo abordaje a la literatura con los adultos mayores”.